Divorcio en Asturias: ¿mutuo acuerdo o contencioso?

Entiende las opciones legales disponibles y elige la vía más adecuada para ti

Divorciarse no es sencillo, pero contar con información clara y fiable puede ayudarte a tomar decisiones más serenas y conscientes. En España —y en Asturias no es la excepción— existen dos tipos principales de divorcio: el divorcio de mutuo acuerdo y el divorcio contencioso.

Ambas opciones están contempladas en el Código Civil y responden a situaciones distintas. A continuación te explicamos en qué consiste cada tipo de divorcio, qué procedimiento conlleva y cuál puede ser más adecuado según tu caso concreto.

¿Qué es el divorcio de mutuo acuerdo?

Se trata de la forma más rápida, económica y menos conflictiva de disolver legalmente un matrimonio. Se recurre a él cuando ambos cónyuges están de acuerdo en divorciarse y en las condiciones de la ruptura.

Requisitos legales

Plazo mínimo: Deben haber transcurrido tres meses desde la celebración del matrimonio, salvo situaciones excepcionales de peligro o maltrato (art. 81 Código Civil).
Sin necesidad de causa: Desde la reforma legal de 2005, no es necesario alegar causa alguna: basta con que uno o ambos quieran divorciarse.

El convenio regulador

El convenio regulador es un documento obligatorio que deben firmar ambos cónyuges. Recoge los acuerdos alcanzados sobre:

Guarda y custodia de los hijos
Régimen de visitas
Pensión de alimentos
Uso de la vivienda familiar
Reparto de bienes comunes

Este documento se presenta ante el juzgado (o el notario, en su caso) y debe respetar el interés superior de los hijos y los derechos de ambas partes (art. 90 Código Civil).

Procedimiento judicial

Se presenta una demanda conjunta firmada por un único abogado y procurador.
El juez revisa el convenio. Si lo considera adecuado, dicta sentencia aprobando el divorcio en pocas semanas.
No suele haber juicio, salvo que se detecten cláusulas lesivas para los hijos o para uno de los cónyuges.

Divorcio ante notario (divorcio exprés)

Si no hay hijos menores o dependientes, la ley permite divorciarse ante notario, mediante escritura pública. Requiere convenio regulador y la asistencia de abogado, pero no hay intervención judicial.
Esta vía, conocida como divorcio exprés, es aún más ágil y puede resolverse en pocos días.

Ventajas del divorcio de mutuo acuerdo

Tramitación más rápida
Menor desgaste emocional
Coste económico reducido (un solo abogado y procurador)
Mayor control sobre los términos del acuerdo

¿En qué consiste el divorcio contencioso?

Cuando no existe acuerdo entre los cónyuges, ya sea sobre la decisión de divorciarse o sobre sus consecuencias, uno de ellos puede iniciar un divorcio contencioso.

Requisitos y características

También requiere que hayan pasado al menos tres meses desde el matrimonio.
No es necesario el consentimiento del otro cónyuge.
Es suficiente con la voluntad de uno solo para iniciar el procedimiento.

Procedimiento judicial

Cada parte debe actuar con su propio abogado y procurador.
Se presenta una demanda de divorcio unilateral, donde se exponen las pretensiones del demandante (custodia, uso del domicilio, pensión, etc.).
El otro cónyuge contesta la demanda y plantea sus propias propuestas.
Se celebra un juicio con aportación de pruebas documentales, testigos, informes periciales, etc.
El juez, tras escuchar a ambas partes y al Ministerio Fiscal (si hay hijos), dicta sentencia fijando las medidas definitivas.

Consecuencias del divorcio contencioso

Mayor duración: el procedimiento puede alargarse varios meses o más de un año.
Mayor coste económico: por la doble representación y la intervención judicial completa.
Menor control sobre el resultado: es el juez quien toma las decisiones.

¿Y la separación judicial?

La separación judicial no disuelve el vínculo matrimonial, pero sí suspende la vida en común. Algunas parejas optan por esta vía por razones personales, económicas o religiosas.

Desde 2005 no es necesario separarse previamente para poder divorciarse, por lo que la separación es cada vez menos frecuente.
Sin embargo, puede ser útil como paso intermedio cuando no se desea, por el momento, romper definitivamente el vínculo matrimonial.

Conclusión: ¿Qué tipo de divorcio te conviene?

Si existe entendimiento y voluntad de colaboración, el divorcio de mutuo acuerdo es claramente la opción más recomendable: es más ágil, económico y menos traumático.
Cuando no hay margen de diálogo, el divorcio contencioso permite poner fin al matrimonio con garantías jurídicas, aunque con más coste y duración.

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